Soy Brenda García Hernández, estudié la licenciatura en Psicología en Centro ELEIA y tengo estudios de maestría en Psicoterapia Psicoanalítica en el Centro Internacional de Estudios Superiores. Además he participado en diversos seminarios relacionados con la sexualidad infantil, ética y dolor y la transferencia entre otros. 

Fui ponente del curso: “Intervención psico telefónica” para la Universidad Popular Autónoma de Puebla y del curso: “Atención al paciente y familiares en crisis” para la Escuela de Enfermería del Grupo Ángeles en repetidas ocasiones. 

A lo largo de mi carrera he desarrollado y aplicado:

• Psicoterapia para niños, adolescentes, adultos y personas mayores.
• Realización efectiva de entrevista psicodiagnóstica.
• Intervención en crisis presencial y telefónica.
• Diseño y desarrollo de cursos psicoeducativos.
• Desarrollo de contenido informativo de divulgación sobre temas psicológicos. 

¿Por qué soy psicóloga?

El innegable peso que tiene nuestro mundo afectivo en el día a día, es mi motor. Desde la primera vez que escuché esa frase tan común “cada cabeza es un mundo” entendí que no todos percibimos, respondemos y actuamos igual ante una misma situación, así que entender el motivo, y explorar la parte desconocida del iceberg de nuestra mente por medio de la escucha, es mi vocación. La diferencia entre oir y escuchar puede reconocerse con facilidad, pero la escucha terapéutica, esa que entre líneas va más allá, es la vía que junto con la historia de cada individuo y la motivación para sus acciones, deja ver el camino directo a su mundo afectivo y es ahí donde el trabajo íntimo y personal resulta tan trascendental y significativo, así que ser ese faro que apunta en la vida de quienes quieren conocer más de sí mismos o profundizar a partir de algún conflicto para elaborar su postura personal con lo que podríamos llamar su “mapa del mundo afectivo”, es un honor y una labor que encuentro siempre única y de lo más especial. Todos en algún momento de nuestras vidas deberíamos darnos una oportunidad de escucharnos en un consultorio psicológico, porque aunque no se habla mucho de eso, es parte fundamental de nuestra salud y además por que nos permite apoderarnos de nuestras acciones desde una postura particular y coherente a nosotros mismos.